Estaba previsto que el nuevo sistema, que cobraría unos 15 dólares por auto para ingresar a la parte más transitada de Manhattan durante el día, empezara a funcionar el 30 de junio.
La ciudad de Nueva York suspendió el miércoles la entrada en vigor de un nuevo plan que preveía cobrar a los vehículos para entrar al centro de Manhattan, en medio de críticas de que afectaría desproporcionadamente a los comercios y a los conductores de menos recursos.
Estaba previsto que el nuevo sistema, que cobraría unos 15 dólares por auto para ingresar a la parte más transitada de Manhattan durante el día, empezara a funcionar el 30 de junio, con el objetivo de reducir la cantidad de vehículos y mejorar la calidad del aire en la Gran Manzana.
Otro de los objetivos del sistema, el primero de su tipo en Estados Unidos, era recaudar ingresos para mejorar el sistema de transporte subterráneo que cada día usan unos 4 millones de personas.
“He tomado esta difícil decisión porque implementar este sistema de tarifa por congestionamiento puede traer demasiadas consecuencias colaterales para los neoyorquinos en este momento”, afirmó la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, en un discurso sobre el costo de vida.
“Por esa razón, he pedido a la autoridad estatal de transporte que suspenda indefinidamente el programa”, agregó.